UN CLASICO DE LA CIUDAD
En nuestra Provincia contamos con un lugar que se volvió emblemático, tanto para los turistas como para los fueguinos. Es un clásico y reconocido lugar en el que no podés dejar de probar el famoso y conocido cordero: Las Cotorras. Por ello, en esta oportunidad hablamos con su dueño, Juan Carlos Lovece, para que nos cuente un poco más sobre sobre su establecimiento.
¿Podría contarnos cómo nació Las Cotorras?
J.C.L.: Las Cotorras nació luego de venir a ver, caminar y recorrer la zona varias veces, tanto en invierno como en verano, y darme cuenta de que en este lugar había más nieve en invierno, lo que nos daba la posibilidad de realizar varios circuitos de nieve y esquí y así poder ofrecer un servicio adicional para los turistas que nos visitaran.
Si de cordero hablamos, Las Cotorras es el lugar ideal para degustarlo, ¿se imaginaba que ocurría esto?
J.C.L.: Al cordero no lo explotaba nadie, se comía únicamente para Navidad y Año Nuevo en la Isla, y se me ocurrió empezar a venderlo periódicamente para los turistas.
¿Qué siente al ser reconocido, nacional e internacionalmente, por el servicio ofrecido en todos estos años?
J.C.L.: Que me lo gané por el trabajo que hice. Quien pasaba por acá, me veía, a las 6 o 7 de la mañana trabajando, eran las 10 o 11 de la noche y aún estaba poniendo una tabla, un tirante, mucho trabajo y esfuerzo para lograr que hoy sea un lugar en el cual los turistas se sientan bien atendidos.
Si decimos Las Cotorras, quienes conocemos el lugar no podemos dejar de relacionarlo con una famosa infusión que ustedes lograron realizar, ¿cuál es su origen?, ¿hoy se sigue haciendo?
J.C.L: El café nace al querer hacer un café distinto al exprés. Tuve la máquina para hacerlo, pero después comencé a probar y me di cuenta que la gente se inclinaba más por el famoso café montañés que por el café exprés que se puede degustar en cualquier lado. Fue cuestión de probar y comenzar a agregarle cosas que lo hicieran una bebida distinta, fui probando el gusto que iba tomando hasta que logré algo que la gente lo agradece cuando nos visita.
Por último, y agradeciéndole por este tiempo, siendo que se trata del emprendimiento de un fueguino, ¿qué siente al ver que desde el comienzo hasta la actualidad los turistas siguen eligiendo Las Cotorras? convirtiéndolo en un clásico infaltable al visitar nuestra ciudad.
J.C.L.: La realidad es que Las Cotorras comenzó con el comentario de boca en boca. En ese entonces no existían los celulares ni los medios con los que contamos hoy. Así que, el turista venía, comía, y al otro año, si volvía, elegía Las Cotorras, y si no volvía, se la recomendaba a sus allegados, familia y amigos: no se pueden perder el servicio que se les ofrece acá. En lo personal, me genera mucha satisfacción porque esto también empezó con europeos, con turistas europeos que venían en los barcos y el que comía en Las Cotorras sabía que iba a volver o que se lo recomendaría a alguien para que venga a visitarnos y degustar nuestros platos.
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